El cineasta estadounidense Steven Spielberg, que el próximo día 26 estrenará la primera entrega de una trilogía sobre Tintin, aseguró que se considera un loco de la tecnología pero señaló que sigue escribiendo sus guiones a mano.
"No tengo página de Facebook y no 'tuiteo'. Tengo un iPhone y un iPad, y me gustan los SMS. Pero los ordenadores no son lo mío. No mecanografío mis guiones, los escribo a mano", aseguró el realizador en una entrevista que hoy publica la revista francesa "Paris Match".
Spielberg relató la forma "tardía" en que entró en contacto con el cómic de Hergué y cómo el dibujante belga le llamó dos semanas antes de su muerte para decirle: "Usted es el único capaz de adaptar a Tintin".
Unos meses más tarde la viuda del dibujante le pidió que viajara a Bélgica y le dijo que quería hacer un álbum con él.
"Me metí en un avión y me fui a Bruselas y, durante un rato, seguí los pasos de Hergé", indicó el cineasta, quien señaló que quería "ver el papel y el lápiz que él tocó, cada objeto que tuviera sus huellas".
Spielberg señaló que descubrió a Hergé a los 35 años, pero que se había acostumbrado a que compararan sus películas con las aventuras de Tintin.
El cineasta señaló que lo que le sigue animando tras haber logrado tantos éxitos es "contar historias".
"Estaría perdido sin cámara, ni actores, ni guionistas. Inventar una historia o inspirarme en un relato, es mi motor, día tras día", comentó.
"No tengo página de Facebook y no 'tuiteo'. Tengo un iPhone y un iPad, y me gustan los SMS. Pero los ordenadores no son lo mío. No mecanografío mis guiones, los escribo a mano", aseguró el realizador en una entrevista que hoy publica la revista francesa "Paris Match".
Spielberg relató la forma "tardía" en que entró en contacto con el cómic de Hergué y cómo el dibujante belga le llamó dos semanas antes de su muerte para decirle: "Usted es el único capaz de adaptar a Tintin".
Unos meses más tarde la viuda del dibujante le pidió que viajara a Bélgica y le dijo que quería hacer un álbum con él.
"Me metí en un avión y me fui a Bruselas y, durante un rato, seguí los pasos de Hergé", indicó el cineasta, quien señaló que quería "ver el papel y el lápiz que él tocó, cada objeto que tuviera sus huellas".
Spielberg señaló que descubrió a Hergé a los 35 años, pero que se había acostumbrado a que compararan sus películas con las aventuras de Tintin.
El cineasta señaló que lo que le sigue animando tras haber logrado tantos éxitos es "contar historias".
"Estaría perdido sin cámara, ni actores, ni guionistas. Inventar una historia o inspirarme en un relato, es mi motor, día tras día", comentó.